miércoles, 9 de noviembre de 2011

Dicen por ahí que ahora tengo carne de cañón cuando piso terrenos de amor. Dicen por ahí que ando triste cuando sale el sol. Que algo me hace perder el control. Pues quien quiera saber, primero, que saque el graduado. ¿Tú que sabes de mi vida? Deja ya de dar la nota, hay que lavarse con jabón esa lengüita y esa boca y saberse callar. Pero ahora vivo dentro del temible escaparate, y tengo que aguantar sin anestesia los ataques. Si, aguantaré lo que me echen. Dicen por ahí que aquí habla hasta el enterrador. Que a los muertos les pita el oído después del adiós. Que no hay forma para que descansen. Dicen por ahí que yo he sido canalla anteayer y mañana también lo seré, con quien tire y me de y se ponga la vena al instante. ¿Tú que sabes de mi vida? Pero ahora vivo…

No hay comentarios:

Publicar un comentario